Este día es un recordatorio del rol decisivo que ocupan las mujeres y las niñas en la sociedad. La diversidad en la investigación aporta nuevas perspectivas al mismo tiempo que potencia a talentosas investigadoras.
Algunas se inclinaron por las ciencias naturales y exactas, como las ciencias de la computación e información, las ciencias químicas o las ciencias biológicas; otras eligieron el camino de las ciencias de la educación o de las ciencias sociales, con énfasis, por ejemplo, en economía y negocios, entre otras posibilidades.
Descubrieron su vocación, se especializaron en diferentes campos dejando su huella, se convirtieron en líderes dentro de sus áreas de expertise y hoy tienen la responsabilidad de ser referentes para tantas niñas que quieren seguir su camino, así como de ser luz para aquellas que aún lo desconocen.
Nora Szasz
Vicedecana académica de la Facultad de Ingeniería.
¿Por qué elegiste desarrollarte en el mundo de las ciencias?
Desde niña veía y entendía el mundo desde la matemática. Me encantaba jugar con los números y hacer descubrimientos de las reglas que rigen las operaciones aritméticas.
Toda la vida supe que mi camino estaba en las ciencias exactas, así que al momento de elegir mi carrera, me dirigí a la Facultad de Ciencias, donde comprendí que en la ciencia no hay respuestas equivocadas, solo hay oportunidades para aprender y descubrir algo nuevo. Y elegí la ciencia de la computación, que fue mi pasión desde el día que empecé a recorrerla.
El camino fue largo y lleno de aventuras. Terminé haciendo un doctorado en Europa y volví a Uruguay, donde me dediqué de lleno a la vida académica. Para mí la ciencia es un viaje sin fin, lleno de desafíos y maravillas por descubrir.
¿Qué mensaje le darías a la niña de esa foto?
Al mirar a esta niña, que soy yo hace 50 años, pienso que ella no tenía idea de que le esperaba un viaje increíble, que la llevaría a lugares que ni siquiera podía imaginar.
Le diría: "Tenés un mundo de descubrimientos por delante, no tengas miedo de equivocarte y de enfrentarte a nuevos desafíos, porque cada experiencia, buena o mala, te llevará hacia la meta. Nunca dejes de preguntar, de investigar y de aprender, porque es así como seguirás creciendo y desarrollándote como científica".
"Recordá siempre que sos capaz de lograr todo lo que te propongas. Creé en ti misma, confiá en tus habilidades y nunca te rindas, incluso cuando las cosas se pongan difíciles. Seguí persiguiendo tus sueños con valentía y determinación, y lograrás aportar tu granito de arena para hacer del mundo un lugar mejor".
Conocé las carreras de la Facultad de Ingeniería
Teresa Cometto
Catedrática de Marketing, coordinadora académica de la Licenciatura en Gerencia y Administración y de la Licenciatura en Negocios Digitales, y docente.
Cuando eras niña, ¿cómo te visualizabas en el futuro? ¿Veías a la ciencia como una alternativa?
De niña me divertía mucho creando sola, escribiendo cuentos y poesías, actuando como maestra. Pero lo que más me entretenía era mi pequeña farmacia construida con frasquitos que lavaba y rellenaba cuidadosamente con materiales que encontraba en la naturaleza: tierra, hojas, piedras, insectos. Siendo honesta, me gustaban muchas cosas, no podría decir que la ciencia estaba en el centro de mis pensamientos.
Fue al llegar al liceo que descubrí el mundo de la química, la investigación y su impacto en la naturaleza. Y no dudé que ese era el camino a seguir, aunque sin dimensionar el impacto que esto iba a tener en mi vida.
La ciencia me ha brindado una base analítica de planteo y resolución de problemas que ha ampliado mis horizontes de manera inimaginable. Me ha proporcionado herramientas para abordar los desafíos de la vida con curiosidad y resiliencia en áreas transversales a los negocios, más allá de las asignaturas en sí mismas. Me ha preparado para hacer un doctorado en el exterior y para desarrollar una gran carrera profesional en la empresa y en la universidad.
¿Qué mensaje le darías a la niña de esa foto?
Le diría: "Sos capaz de lograr cualquier cosa que te propongas, incluso si en este momento no podés imaginarlo. No tengas miedo de explorar tu curiosidad y perseguir tus intereses. Atrevete a seguir tu pasión por la ciencia, porque dentro de ti hay un potencial infinito para hacer contribuciones increíbles al mundo. La ciencia es una guía en la toma de decisiones informadas, que abarca desde pequeñas elecciones diarias hasta grandes decisiones que moldearán tu futuro. Confiá en ti misma, pedí ayuda, apoyate en las personas que te valoran y nunca dejes de soñar en grande".
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Lorena Betancor
Catedrática de Biotecnología. Docente de la carrera de Ingeniería en Biotecnología y directora del Grupo de Tecnología de Proteínas de la Facultad de Ingeniería.
¿Encontraste algún obstáculo en la elección de tu carrera? ¿Qué científica te ha inspirado desde niña?
Sinceramente, fui muy afortunada, ya que pude elegir la carrera que me motivaba. La curiosidad fue lo que me llevó a la ciencia. Me fascinaba el mundo de lo pequeño y la razón por la cual los organismos vivos funcionaban como lo hacían.
En mi adolescencia, conocí a través de la lectura a varias científicas —Madame Curie, Rosalind Franklin, entre otras— que, junto con las mujeres de mi familia, me sirvieron como modelos a seguir.
Esos fueron los ingredientes para tomar la decisión de realizar una Licenciatura en Bioquímica a principios de los años 90 en Uruguay, donde el derecho, la medicina y la economía parecían opciones más seguras.
Más tarde descubrí que esas decisiones audaces en mi vida profesional me llevaron a los resultados más maravillosos. No solo en cuanto a lo que he aprendido de ellas, sino también en relación con la cantidad de personas y lugares que he conocido y visitado, que me han nutrido como persona y en mi camino profesional, primero como estudiante de doctorado y luego como investigadora en biotecnología.
¿Qué mensaje le darías a la niña de esa foto?
Le diría: "Confiá en ti. Hay muchísimo por descubrir. Apoyate en las personas que te rodean y pedí ayuda sin miedo cuando creas que no podés sola. Siempre hay alguien dispuesto a ayudar".
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Marina Melani
Licenciada en Diseño Industrial por la Facultad de Comunicación y Diseño. Doctora en Educación por el Instituto de Educación de la Universidad ORT Uruguay.
Desde la educación, ¿cuáles son los aportes que esperás dejarle a la sociedad con tus investigaciones? ¿Alguna vez lo imaginaste de niña?
Las áreas en las que he investigado y me interesa investigar han ido cambiando. Hoy día estoy focalizada en todo lo que tiene que ver con la competencia emprendedora, la capacidad de las personas de comportarse con una actitud proactiva, de poder pensar creativamente, de tener lo que se conoce como actitud emprendedora.
Espero poder motivar a las personas a trabajar, entrenar y explorar su potencial creativo. La creatividad es una habilidad que se entrena, que requiere un esfuerzo consciente y que implica la adquisición de ciertos hábitos. Es un área que muchas personas van dejando de lado, y espero poder mostrar y dejar evidencia de que nunca es tarde para retomarla. De niña, no me imaginaba específicamente en este rol, creo que, en parte, porque no lo conocía como camino posible.
¿Qué mensaje le darías a la niña de esa foto?
Lo primero que pensé es en la importancia de confiar. Confiar en mi instinto, en mis intereses, en lo que me apasiona. Confiar en que lo que nos moviliza profundamente, sea lo que sea, puede ser un camino de desarrollo profesional, por más que parezca difícil visualizarlo como tal al inicio. Pero a la vez que pienso esto, soy consciente de que la confianza se construye, y que mucho tiene que ver con la red de soporte que nos acompaña en la vida desde que nacemos. Ojalá todas las niñas puedan encontrar la confianza necesaria en su interior para perseguir sus sueños.
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Paula Cardellino
Docente e investigadora de la Facultad de Arquitectura.
¿En qué podés ver el desarrollo de la ciencia desde tu profesión como doctora?
El doctorado fue la culminación de un trabajo extenso de investigación que venía llevando a cabo desde mi obtención del título de Arquitecta. La necesidad de entender la verdadera relación entre el diseño arquitectónico, especialmente aquel destinado a la educación, y las personas que lo habitan, me llevó a querer aplicar un método científico que me permitiera verificar varias hipótesis que venía manejando sobre este vínculo.
El convertirme en doctora me permitió adentrarme en el área de las ciencias sociales y aportar conocimiento nuevo al mundo científico a través del análisis de aspectos no tan tangibles que se relacionan con la vida cotidiana. A su vez, me abrió la puerta a otras escalas de investigación y de colaboración con colegas investigadores en todo el mundo que provenían de distintas ramas del conocimiento.
¿Qué mensaje le darías a la niña de esa foto?
Le mostraría que el interés genuino por la arquitectura y las posibilidades de entender el comportamiento humano en relación con este espacio construido es posible. Las ciencias sociales permiten adentrarnos en la investigación de una forma muy directa a través de la observación del comportamiento humano en esos espacios arquitectónicos.