Oportunidades de Aprendizaje

“Un problema es que, en lugar de … readecuar las propuestas formativas a esta realidad, la solución ha sido bajar la vara. Las exigencias para obtener el título han disminuido y es común que en los países en los que existe una prueba para el ingreso a la universidad sean las carreras de educación las que exigen menor puntaje y resultan ser la segunda y hasta la tercera opción de carrera de los estudiantes.” (Aguerrondo, 2010). Una tercera característica está dada por la clase de Estado propio de América Latina . “El reto de la región se sintetiza en la idea de que un sistema tradicionalmente pensado para la homogeneidad debe ahora reorganizarse para dar paso a la heterogeneidad. Sin embargo, una dificultad generalizada es que el discurso de la descentralización y asunción de responsabilidades en los niveles inferiores de la burocracia estatal es extraño a la tradición latinoamericana. … Tanto la burocratización del gobierno escolar, cuanto la variación de las condiciones externas que hoy obligan a efectuar cambios rápidos, a diferenciar y especializar los servicios educativos ofrecidos, han puesto en jaque este modelo generando una tendencia basada en la ruptura del modelo jerárquico – piramidal del Estado para responder a la necesidad de relaciones más directas entre las instituciones y los niveles de decisión y gestión política.” (Aguerrondo, 2012). “Por otra parte, después de dos décadas de aplicación del modelo de las escuelas eficaces se ha comprobado que la autonomía escolar, sin el acompañamiento de la autoridad educativa, resulta en abandono institucional, por lo que la labor del Estado es más importante que nunca” (del Castillo Alemán y Azuma Hiruma, 2009: 44). Lo importante es no oponer la gestión micro a la gestión macro, sino encontrar los mecanismos y procedimientos que permiten que ambas se retroalimenten 15 . Pero esto supone no solo la reforma del modelo organizativo del sistema escolar sino concomitantemente la reforma del Estado, bajo premisas extrañas a nuestra tradición, como la descentralización, pero también que se debe revisar la tradición de una estructura homogénea de los diferentes sectores del Estado (ministerios), y pensar cuál es el modelo organizativo más adecuado para una gestión masiva y descentralizada, como debe ser la del servicio educativo. La pregunta sería ¿qué Estado en América Latina puede conducir el proceso de reforma educativa (permanente) de manera adecuada? ¿Es la descentralización la panacea? O persiste la duda que seña la Gairín en el título de su libro “La descentralización educativa. ¿Una solución o un problema?”? (Gairín, 2003). Finalmente, pero no menos importante, está lo que podemos llamar las limitación del pensamiento alternativo, que colocamos como parte de la escasez de recurso político, necesario para la movilización hacia un cambio de la envergadura del que se enfrenta hoy la región en el tema educativo 16 . Para liderar este pensamiento prospectivo se requiere de una clase intelectual capaz de generar pensamiento apropiado para la región y que sea capaz de cuestionar el status-quo de las discusiones académicas. América Latina tiene tradición de pensadores que han hecho aportes para el desarrollo del pensamiento social global como, Cardoso y Faletto 17 , Paulo Freire 18 o Emilia Ferreiro 19 , y también registra una tradición 15 Fullan ha llamado a este proces o la ‘gestión tri -nivel´ que relaciona no solo lo micro y lo macro sino también las instancias intermedias. (Fullan, 2009). 16 Como dice Tedesco (2000, 88) “La ausencia de equidad y la lentitud en el ritmo de cambio educativo pueden poner en riesgo el aume nto de la competitividad económica así como la gobernabilidad democrática de las sociedades”. 17 Fernando Henrique Cardoso (1931) y Enzo Faletto (1935) son autores de la teoría de la dependencia, respuesta teórica (en lo s