Oportunidades de Aprendizaje
Otra fuente para incorporar innovaciones proviene del acceso directo a las páginas web de diversas iniciativas educativas de América Latina y el Caribe. La identificación de casos se centró en las experiencias que se auto-definen como alternativas al sistema tradicional y que buscan la mejora de aprendizaje de niños, niñas, adolescentes y jóvenes. El inventario de experiencias ha buscado reconocer iniciativas que incluyan a poblaciones que hoy están fuera del sistema educativo formal (e.g. algunos grupos indígenas, algunos sectores de las poblaciones afro-descendientes, migrantes internos, niños y niñas y adolescentes en zonas marginales urbanas) 9 . Las bases de datos encontradas 10 buscan dos objetivos alternativos: uno se refiere a dar a conocer a académicos y tomadores de decisión estos nuevos rumbos, y el otro se refiere a diseminar entre los docentes y los equipos directivos estas experiencias para que puedan servir de inspiración para su réplica. Sin embargo, la información encontrada sobre estas experiencias no facilita ni un adecuado uso académico de la información, ni las reales posibilidades de inspiración por parte de otros docentes dado que el contenido de cada experiencia prioriza los aspectos referidos a su visión y misión, pero en general se da menos relevancia a la descripción de los aspectos metodológicos, los procedimientos utilizados, las características del proceso de cambio y sus dificultades. El relevamiento evidencia también las dificultades de innovar en contenidos, enseñanza y aprendizaje dentro del formato escolar tradicional. Parecería que la re-conceptualización de los contenidos, competencias, enseñanza y aprendizaje se da más fácilmente cuando está asociado a las TIC. Otro aspecto interesante que surge del análisis se refiere al énfasis que muchas propuestas otorgan a la familia y comunidad. En función de esta carencia de información surge el interrogante sobre si estos reservorios son realmente insumos para el cambio. Para que lo fueran deberían cumplir dos condiciones: ser portadores de cambios profundos (ser ‘innovaciones’) y haber superado la prueba del ‘gran número’, o sea existir con probada eficacia en un número no menor de unidades educativas. Entonces ¿son ‘innovaciones’ reales las experiencias que se presentan como tales? Hay poco acuerdo académico acerca de cómo definir qué es una innovación y además es poco común que la información encontrada ofrezca evidencias claras al respecto. Si se entiende la innovación como un avance hacia un cambio de paradigma educativo, puede plantearse la hipótesis de que la gran mayoría de las que aparecen en los listados de experiencias innovadoras son ‘mejoras’ del paradigma tradicional, pero no ‘innovaciones’. 9 Cabe señalar que la categorización de iniciativas latinoamericanas no fue tarea fácil. Muy a menudo, la información no está disponible o es escasa para analizar cuáles son las propuestas que tienen más sostenibilidad y replicabilidad. En futuros estudios habría que estudiar más en profundidad los casos relevados y evaluar en qué medida pueden constituir experiencias inspiradoras para re-pensar el modelo tradicional y construir alternativas viables y sostenibles. 10 En el Anexo 1 se presenta una síntesis con una somera identificación de los casos.
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